Brooks Renshaw tiene poco tiempo en sus manos para lidiar con los problemas. Pero cuando su madre aparece después de un fin de semana en Las Vegas casada con alguien que nunca conoció, decide cavar un poco. Resulta que ella se enganchó con un estafador con un historial de desudas incobrables y mujeres abandonadas en el camino. Cuando Brooks descubre que su nuevo padrastro tiene una hija, decide mirarla a ella también. Solo cuando encuentra a su nueva hermanastras, está listo para darle exactamente lo que quiere.
Eleanor trabaja como una enfermera interna para madres primerizas. Pero su necesidad de tener un bebé propio la ha llevado a tomar cartas en el asunto. No es la situación ideal, pero ya no puede esperar más al señor Perfecto. Pero una llamada telefónica sobre un trabajo final puede cambiar todos sus planes cuidadosamente elaborados.
Advertencia: ¡Este libro es sucio, pegajoso, con abundancia de bebés! Podrían ser hermanastro y hermanas, pero oye, ¿quiénes somos para detener el amor? ¡Apaga las luces, porque tenemos algo que decir, que hacer!
No hay comentarios:
Publicar un comentario